La imagen romántica del emprendimiento suele mostrar al fundador visionario que un día tiene una gran idea, la convierte en producto y, como por arte de magia, el mercado la adopta masivamente. La realidad es mucho más dura; la mayoría de startups no fracasan por falta de esfuerzo o tecnología,…
Blog personal de Juan Jesús Velasco. Me gusta escribir sobre startups, negocios digitales e innovación abierta.


