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Cómo construir tu estrategia Go-to-Market paso a paso: GTM para startups

go-to-market para startups

En el artículo anterior hablamos de Go-to-Market y repasamos los errores más comunes y mitos alrededor del lanzamiento de un producto al mercado. Hoy vamos a seguir hablando de GRM pero desde una perspectiva más práctica y orientada a la acción: ¿cómo se construye realmente una estrategia Go-to-Market* eficaz para una startup en fase temprana?

Para empezar, hagamos un poco de spoiler: un buen GTM no es una presentación en PowerPoint o un documento de texto estático. Es un proceso vivo de aprendizaje continuo, validación, iteración y enfoque.

Vamos a recorrer las fases clave para definir tu estrategia Go-to-Market, desde el punto cero hasta los primeros resultados, combinando frameworks, ejemplos, herramientas prácticas y errores a evitar.

Así que vamos a ello.

1. Entiende el contexto y los fundamentos del Go-to-Market

Una estrategia Go-to-Market no nace en el vacío: debe estar alineada con tu visión, modelo de negocio y momento de desarrollo.

Antes de pensar en canales o campañas, debes tener claro:

Por eso es tan importante que antes de pisar el acelerador tengamos validados los aspectos clave de nuestro negocio

2. Define tu ICP (Ideal Customer Profile) con precisión quirúrgica

Este es el paso más importante y el más ignorado por muchas startups.

Si tu cliente ideal no está bien definido, todo lo demás (mensaje, canal, onboarding, pricing) fallará porque estarás lanzando un producto, una propuesta de valor y un mensaje que no tienen nada que ver con cómo piensa, cómo actúa o qué necesita tu cliente.

Tu ICP no es el mercado total, ni siquiera tu buyer persona genérico. Es el perfil que más necesita tu solución, ahora mismo, y está dispuesto a pagar por ella.

¿Y esto qué implica? Que tenemos que identificar de, entre todos nuestros potenciales clientes, quién nos necesita más y, además, tenemos capacidad de llegada a éste.

Una forma práctica de seleccionar tu mejor ICP es clasificar posibles clientes con base en tres criterios: deseabilidad, viabilidad y accesibilidad. Aquí te dejo una tabla orientativa:

Deseable Viable Accesible
El cliente está preparado para nuestro producto Tamaño de mercado suficiente Los clientes son fáciles de encontrar
El problema a resolver le preocupa (intensidad) Capacidad de generar valor de manera sostenible Podemos caracterizar a los clientes, comunicarnos e incluso entrevistarlos
Está intentando resolver el problema con frecuencia Tenemos capacidad para resolver el problema identificado Podemos identificar al decisor
No está contento con las soluciones actuales (insatisfacción) Podemos llegar a ellos mediante canales identificables

Para cada cliente asignamos una puntuación en base a cada criterio y el que tiene la puntuación más alta es el que deberíamos elegir (multiplicar los puntos permite ver mucha más dispersión y permite tener las cosas más claras a la hora de elegir).

Cómo validar el ICP:

3. Construye tu propuesta de valor y mensajes clave: un Go-to-Market sin una propuesta de valor clara es como si a Star Wars le quitas la banda sonora de John Williams

La propuesta de valor materializa cómo resolvemos el problema de nuestro cliente; es una promesa que le estamos haciendo y el cliente espera mejorar su situación, que resolvamos su problema… y que además lo hagamos de una forma que, especialmente, le satisface.

Tu mensaje tiene que responder claramente a estas tres preguntas:

Una cosa que suelo plantear mucho cuando hablo de propuesta de valor en clase es que la humanidad ha llegado hasta 2025 sin nuestros productos o, al menos, se las ha apañado. Por tanto, a nuestro cliente le tiene que quedar muy claro qué va a ganar si opta por nuestro producto.

Razones para cambiar de producto - Go-to-market para startups
Diagrama de fuerzas del cambio en el Go-to-Market: los usuarios se debaten entre los problemas de su solución actual y la atracción de una nueva, frente al peso de sus hábitos y el miedo al cambio. Fuente: adaptado de la teoría de empuje y tracción de soluciones

Tu propuesta de valor debe ser:

Por ejemplo: «Automatizamos la conciliación contable para pymes tecnológicas y ahorramos 8h semanales al CFO».

Una buena propuesta de valor habla de beneficios y esto es aún más importante en B2B donde nuestro cliente (y los decisores) tienen que tener claro qué ganan y cómo nuestro producto les ayuda a alcanzar los KPIs por los que les evalúan.

4. Selecciona tu tipo de lanzamiento: qué estrategia de entrada vas a usar en tu Go-to-Market

Hay múltiples formas de salir al mercado, así que toca elegir el cómo lo vamos a hacer.

¿Qué factores influyen en esta decisión? Pues depende del «momento» del mercado y nuestra empresa, el producto que vamos a lanzar y los recursos con los que contamos:

Estrategia de Lanzamiento Objetivo Ventajas Ejemplo de aplicación
Pre-lanzamiento Generar expectativa y leads Base de datos lista para el día 1 Lista de espera + campaña email
Lanzamiento progresivo Testear y ajustar en fases Menor riesgo, más feedback Rollout por regiones o sectores
Soft launch Liberación controlada Evitas presión y recoges insights Lanzar en comunidad nicho
Lanzamiento por invitación Crear escasez y validación social Exclusividad, boca a boca Acceso limitado con códigos

El objetivo no es impresionar al mercado o los clientes, es aprender y mejorar antes de escalar.

5. Elige y prueba canales de adquisición de forma estratégica

No necesitas estar en todos los canales desde el primer momento. Necesitas identificar el canal donde tu ICP ya está y está dispuesto a escucharte; estar en el resto, simplemente, por «estar» es perder el foco y gastar más recursos de los necesarios.

Canales típicos en early-stage:

Lo importante:

6. Pricing: fija precios desde la validación, no desde la intuición

El pricing es parte central de tu Go-to-Market. No se trata solo de cuánto cobras, sino de cómo justificas ese precio y cómo lo percibe el usuario.

Cómo validarlo en fase temprana:

7. Define tu «Whole Product» y onboarding

Tu producto mínimo viable no es solo la funcionalidad técnica. Es todo lo necesario para que un usuario obtenga valor y se quede.

MVP - Cómo medir la demanda de un producto

Por tanto, el producto no son solamente las funcionalidades técnicas, también lo es cómo lo entregamos, qué experiencia de uso tiene, qué soporte a usuarios tenemos, cómo guiamos a los usuarios en sus primeros momentos en nuestro producto (onboarding)…

Resumiendo, el «whole product» incluye cosas como:

Solamente si el usuario percibe valor, habrá retención. Solo si hay retención, habrá un GTM real.

Nuestra obsesión en estos primeros momentos es que el usuario alcance su «éxito» dentro del producto; es decir, que entienda cómo le ayudamos a resolver su problema y lo entienda lo antes posible.

8. Mide lo que importa: métricas clave de Go-to-Market

El GTM se valida con datos, estas son las métricas esenciales:

Métrica Descripción Ejemplo
CAC Coste total para adquirir un cliente 50 € gastados en marketing por cliente
LTV Ingresos totales por cliente SaaS de 300 €/año x 10 años
Churn % de clientes que abandonan 5% cancelan mensual
Conversión % usuarios que completan acción clave 20% registro, 5% compra
Payback CAC Meses en cubrir CAC con ingresos 6 meses en promedio

9. Itera y ajusta: el Go-to-Market no es un plan estático

El mercado cambia y, por tanto, tu producto debe cambiar y adaptarse lo cual también implica que tu estrategia debe adaptarse. Un GTM exitoso no se lanza una vez, se optimiza cada semana.

Framework recomendado: Medir → Analizar → Ajustar → Implementar → Repetir

¿Qué debemos revisar periódicamente?

Ciclo continuo de una estrategia Go-to-Market: desde la planificación del producto hasta su lanzamiento, monitoreo y ajustes basados en el rendimiento. Fuente: Logic 20/20
Ciclo continuo de una estrategia Go-to-Market: desde la planificación del producto hasta su lanzamiento, monitoreo y ajustes basados en el rendimiento. Fuente: Logic 20/20

10. Conclusión: una estrategia GTM bien diseñada no se improvisa

No importa si estás lanzando tu primer producto o una nueva feature dentro de una startup en crecimiento: el Go-to-Market es tu mapa de navegación.

Es el vínculo entre lo que construyes y a quién se lo vendes.

Y si lo haces bien, lograrás más que ventas: lograrás validación, aprendizaje y posicionamiento sostenible.

Nos seguimos leyendo. Hasta la próxima.

Imágenes: RDNE Stock project en Pexels, Paul Brown en Medium, Oksana Kovalchuk en Medium, Logic 20/20 y GIPHY

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