Uno de los aspectos que más debates generan en las aceleradoras a la hora de seleccionar startups es la configuración del equipo. El debate no es solamente sobre los perfiles (si es un equipo multidisciplinar), también sobre las dedicaciones que estos tienen al proyecto. Dicho de otra forma, ¿son emprendedores full-time o es una startup con fundadores a tiempo parcial?
Precisamente, hace unos días, Marek Fodor (inversor y fundador de Kantox) lanzaba en Twitter algunas reflexiones sobre este tema tan controvertido y, a la vez, tan fundamental.
Part-time co-founders deberían siempre tener pactado un plan con hitos concretos que (si se cumplen) les obliguen a mojarse más y hacerse full-time. Sin ese compromiso son meros colaboradores que cobran caro (=equity)
— Marek Fodor (@fodor) 14 de agosto de 2018
En una startup, es decir, en una compañía en fase temprana, todo depende de la ejecución así que el equipo es clave.
De hecho, los inversores en etapa temprana están invirtiendo más en el equipo que en el negocio (porque las métricas que éste va a mostrar no van a ser especialmente relevantes); así que asumen un riesgo porque confían en un equipo que, en teoría, «se va a matar» por sacar adelante su proyecto…
Vale la pena recordar al clásico: Comprometidos (cerdos) vs. involucrados (gallinas). pic.twitter.com/EAk5aRSOA9
— Marek Fodor (@fodor) 14 de agosto de 2018
La cosa cambia cuando encuentras un equipo que está formado por fundadores a tiempo parcial. Aceleradoras e inversores están aportando recursos y, sin embargo, los promotores del negocio (todos o parte de ellos), no están apostando al 100% por éste.
¿Es algo que tiene sentido?
Hacer temporalmente consultoría en vez de producto para sobrevivir no es lo mismo que tener algunos co-founders part-time, con empleos fuera (gallinas).
— Marek Fodor (@fodor) 14 de agosto de 2018
Emprender y vivir, hay que hacer ambas cosas
Poner en marcha un negocio no es una tarea sencilla y, además, tiene impacto en nuestro entorno personal.
Como ya comenté en su día, la mejor manera de poner en marcha una startup es estar centrado al 100% y contar con un colchón personal que nos permita vivir mientras ponemos en marcha nuestro negocio.
Sin duda, es la situación deseable para los socios fundadores de una startup, estar al 100% con el negocio y respaldados por un colchón económico (ahorros, indemnización por despido, capitalización de la prestación por desempleo, etc.) que les permita pagar el alquiler y comer.
Al leer esto podrías pensar que lo que digo está genial en un mundo ideal y las cosas no son siempre tan simples.
¿Y si no puedo dejar mi trabajo? ¿Acaso no puedo emprender? En mi opinión, es bastante complicado estar en una empresa y, por otro lado, estar montando la tuya propia.
El día tiene 24 horas, 8 (o más) hay que dedicársela al trabajo por el que nos pagan y, además, uno necesita descansar y pasar tiempo con la familia. Por tanto, el tiempo disponible para nuestra startup se reduce mucho y esto va a significar que vamos a avanzar lentamente.
¿Y no podría buscar un equipo para ayudarme? Claro, tener un equipo es clave para avanzar pero ¿y si en este nuevo equipo hay fundadores a tiempo parcial también? Seguramente, si no hemos abordado la difícil conversación de «repartir la tarta», aparecerán problemas en el futuro por las asimetrías entre socios (fundadores a full-time y fundadores a tiempo parcial).
Los problemas internos en startups con fundadores a tiempo parcial
Los socios fundadores de una startup, en teoría, están comprometidos con el proyecto y con el resto de socios.
Se embarcan en una aventura por la que apuestan su tiempo, su patrimonio, su entorno personal (dedicar menos horas a la familia) y, por supuesto, tienen un coste de oportunidad importante (porque podrían estar trabajando en una gran compañía).
Teniendo en cuenta estos factores junto a cosas como «quién tuvo la idea», «quién aporta el know-how» o «quién aporta los contactos comerciales» (que ya suelen generar roces internos), que haya fundadores a tiempo parcial añade otra variable explosiva más a las relaciones entre los socios.
¿Qué pasa cuando hay fundadores a tiempo parcial? Si todos los socios están a tiempo parcial, el tiempo que van a dedicar al proyecto va a estar por debajo de una jornada laboral y esto afectará a la velocidad de desarrollo del mismo.
Además, será complicado cuadrar reuniones de coordinación y, en el fondo, todos pueden tomarse el proyecto como una «segunda actividad complementaria» y no dar el 100%.
Las cosas se pueden complicar cuando, para paliar la poca disponibilidad, se suman al proyecto muchos perfiles diversos a tiempo parcial con la socorrida solución de «entrar a partes iguales».
¿Y por qué se complican las cosas? Equipo grande, con perfiles diversos y con «clanes» según afinidades personales (un socio trae a otro socio y se montan «casas o familias» como en Juego de Tronos), con disparidad de horarios que les hace complicado coordinarse, con familia y obligaciones laborales (que son las que pagan la casa y la comida)…
Liderar un equipo así es complicado por muchas reuniones de seguimiento o planificaciones que se hagan. Son fundadores a tiempo parcial y tienen otras obligaciones además de aportar a la startup.
Al final, todos son socios a partes iguales pero nadie siente el «tic-tac» del reloj porque las necesidades personales están cubiertas y no pasa nada si el proyecto se dilata hasta el infinito o las cosas no salen (porque, al menos, se intentó y fue una aventura curiosa).
Dicho de otra forma, 6 socios a tiempo parcial no dan como resultado 3 socios a full-time. En este caso, las matemáticas no juegan a nuestro favor.
Cuando mezclamos socios a tiempo completo con socios a tiempo parcial la situación tampoco mejora mucho (salvo que el cap-table esté bien repartido).
Imaginemos la situación. Por un lado, tenemos socios a tiempo completo que están apostando por la startup y aportando tiempo y recursos, asumiendo su coste de oportunidad y, seguramente, viviendo con un colchón económico propio o aportado por su entorno.
Por otro lado, tenemos socios a tiempo parcial que tienen sus empleos por cuenta ajena y, en la medida de sus posibilidades, dedican tiempo al proyecto.
¿Qué es lo que va a ocurrir? Se generarán roces por las asimetrías en las dedicaciones y compromisos personales. Salvo que el tema se haya abordado al inicio y las cosas se hayan dejado claras, las diferencias de dedicación generar problemas porque las comparativas entre personas son algo intrínseco a las personas.
Pensemos en cosas como, por ejemplo, reparto de equity a partes iguales con socios a tiempo completo y tiempo parcial. O, incluso, que el CEO esté a tiempo parcial pero sea CEO porque «aportó la idea»… Son situaciones que se pueden llegar a dar y, normalmente, terminan bastante mal.
Los problemas externos en startups con fundadores a tiempo parcial
Si gestionar un equipo combinando socios a tiempo parcial y socios a tiempo completo implica muchos riesgos y no es nada fácil, las cosas se complican cuando llegan nuevos socios a la empresa: los inversores.
¿Qué foto percibe un inversor cuando analiza una startup con socios a tiempo parcial? Los fundadores de la compañía le piden dinero a un inversor para que confíe en el proyecto y, sin embargo, los propios socios no se ha comprometido al 100% con el mismo… ¿Pensáis que el inversor confiará en el negocio?
Como dice Javier Megías, la clave de una startup en fase inicial es su piloto (fundadores) y no tanto el vehículo (negocio); así que un coche sin equipo, sin mecánicos y sin un piloto, de poco nos vale para competir. Va a ser complicado que encuentre un patrocinador.
¿Y si parte del dinero del inversor es para que los fundadores tengan un salario y se dediquen full-time al proyecto? En mi opinión, este es un debate muy interesante porque el abanico de respuestas es muy variado.
Particularmente, creo que un inversor en fase temprana (business angel) espera que la inversión sea para producto y comercialización, lanzar el MVP al mercado y tener primeras métricas. No espera que los fundadores se pongan un salario; son empresarios y tienen que asumir riesgos (compartirlos con el inversor) y no tener una mentalidad de «empleado» con salario fijo.
Otra cuestión es que el time-to-market sea grande y se pueda pactar una especie de «salario de subsistencia» pero esto es casi más para aceleradoras y préstamos participativos públicos que para una inversión.
Para las aceleradoras los socios a tiempo parcial también son un handicap importante. ¿El motivo? Es complicado que puedan seguir la intensidad del programa, su disponibilidad de tiempo es reducida y no están centrados al 100% en el proyecto.
El ritmo de una aceleradora les puede generar más ruido que ayuda porque les impacta en su trabajo y su entorno personal.
Para las aceleradoras, las startups con fundadores a tiempo parcial no suelen encajar en sus estándares porque no aprovechan tanto el programa (no disponibilidad) ni tampoco son especialmente ágiles a la hora de tomar decisiones.
Al final, los que invierten en una compañía (inversores y aceleradoras), quieren ver compromisos y no implicaciones (y la diferencia está en la historia del cerdo y la gallina a la que hacía mención Marek Fodor).
¿Cómo gestionar los socios y fundadores a tiempo parcial?
En general, el tema de los socios a tiempo parcial es algo que genera mucho ruido en las startups y también en las empresas (hay un caso de la Harvard Business School sobre el tema) si no se han fijado los parámetros adecuados al inicio de las relaciones.
¿Y cómo gestionar los socios a tiempo parcial en una startup? Una primera opción es, directamente, no tenerlos pero también hay otros mecanismos.
Objetivos y compromisos
Una startup se fundamenta en los compromisos y los socios tienen que comprometerse entre ellos y con el proyecto.
Si las dedicaciones de partida están claras (totales y parciales) y todo el mundo está cómodo y de acuerdo, hay que regular las cosas hoy pero pensando en el futuro.
Por tanto, sería sano marcar para cada socio sus objetivos a corto y medio plazo cubriendo dos aspectos clave:
- Por un lado, marcar un compromiso de permanencia por un plazo determinado para cada miembro del equipo promotor
-
Por otro lado, para los socios a tiempo parcial hay que marcar un periodo de tiempo en el que tienen que aumentar su dedicación para pasar a ser socios a tiempo completo si, realmente, quieren una equiparación con respecto al resto de socios promotores
¿Y qué puede ser condiciones razonables? Pensando en solidaridad entre socios, si la compañía comienza a generar caja, los socios a tiempo parcial podrían pasar a tiempo completo (aunque esto no tiene que significar igualdad en la propiedad del negocio).
El vesting y el pacto de socios
El reparto de equity entre socios no tiene que ser a partes iguales y, de hecho, hacerlo así es un error porque ni las funciones, ni las responsabilidades ni las dedicaciones son iguales.
Una manera de proteger la propiedad de la compañía de las asimetrías es mediante las cláusulas de vesting en los pactos de socios.
Con el vesting controlamos dos parámetros, por un lado la permanencia de un socio en la compañía y, por otro lado, su dedicación y tiempo invertido en el proyecto. Con estas cláusulas, un socio no es propietario de sus acciones directamente por ser socio; un bloque de sus participaciones se irán desbloqueando conforme permanezca en la compañía (y aporte valor a la misma).
Si el socio se retira antes de, por ejemplo, finalizar el primer año, podría no consolidar ninguna participación si así se firmó en el pacto de socios (pensando en un caso extremo).
En caso de fundadores a tiempo parcial, su vesting podría ser «más lento» que el de los socios a tiempo completo; es decir, consolidarían menos acciones conforme pase el tiempo porque su «tiempo invertido» es menor.
Diferenciar entre socio-fundador y colaboradores/advisors
Vinculado a todo lo anterior, podemos diferenciar niveles o roles dentro de los socios de una startup.
Considerar socios-fundadores a los socios que están a tiempo completo y, por tanto, llevan el peso de la gestión y la toma de decisiones en el proyecto. Están comprometidos al 100% y, por tanto, tienen el derecho de gobernar la empresa.
Por otro lado, los socios que están a tiempo parcial no deberían considerarse socios-fundadores. Su aportación es parcial y, seguramente, específica dentro de un área de conocimiento concreta. Su participación es similar a la de un advisor y, como socio, tendrá sus objetivos y aportaciones a realizar pero no ostentará tanto peso en la gestión ni en la toma de decisiones.
¿Son socios todos? Sí, por supuesto que lo son. Sin embargo, sus derechos políticos en la empresa son distintos y, además, también debería ser muy distinta su participación en la propiedad del negocio (el porcentaje de acciones debe ser mucho mayor en socios a tiempo completo que en socios a tiempo parcial).
¿Y hay alguna otra manera de generar un colchón económico y facilitar a transición de tiempo parcial a tiempo completo? La hay, se podría diversificar un poco la actividad y asumir algún que otro proyecto que genere algo de caja en la empresa y no nos desvíe demasiado de nuestros objetivos.
Al final, como hemos comentado en otras ocasiones, los socios de una startup se tienen que sentar a hablar sobre muchas cosas seriamente y definir sus reglas de juego.
Espero que todo esto os pueda servir de ayuda.
Imágenes: Startup Stock Photos y Giphy