“Si en los inicios no puedes alimentar a tu equipo con dos pizzas, es que es demasiado grande” – Jeff Bezos, CEO y fundador de Amazon
Jeff Bezos es el fundador y CEO de Amazon, una compañía que se ha convertido en un referente en el ámbito de la logística, los contenidos digitales (gracias al Kindle y todos los servicios de contenidos que podemos encontrar para este libro electrónico) e, incluso, en el ámbito de las infraestructuras en la nube.
La regla de las dos pizzas de Jeff Bezos, aunque pueda parecer una «frase en modo gurú» es una muy buena referencia a la hora de mantener el control de un equipo dentro de una gran organización y, por supuesto, también en los inicios de una startup.
Jeff Bezos sigue aplicando esta regla en Amazon a la hora de controlar el número de asistentes a una reunión puesto que, cuanto más gente asiste a una reunión, más improductiva puede llegar a convertirse. Es complicado tomar decisiones en una reunión a la que asisten 10-12 personas, las unidades organizativas pequeñas son más manejables y permiten que todos los miembros conozcan mucho mejor al resto del equipo (qué hacen y qué áreas de expertise tienen); por tanto, llegar a un consenso o avanzar en un asunto determinado es más sencillo que organizar «una gran asamblea» donde todo el mundo habla y, al final, no se llega a ningún acuerdo (o la conclusión de la reunión es que hay que volver a reunirse de nuevo).
En el ámbito de las startups, la regla de las dos pizzas de Jeff Bezos también es un buen patrón para comprobar si la compañía está creciendo sin demasiado control. A veces, uno puede llegar a pensar que cuanto más grande es un equipo, más cosas podemos llegar a hacer y, por tanto, la compañía puede crecer más rápido.
Más gente no hace que una empresa avance más rápido; la escalabilidad horizontal no es algo tan simple, requiere que todos los miembros del equipo funcionen en armonía, casi como las piezas de un reloj de maquinaria compleja. El crecimiento del personal de una startup pasa por la evolución de ésta; es decir, pasar de un grupo de socios fundadores a tener los primeros empleados con los que crear pequeñas unidades organizativas.
Pasar de 2 socios a una empresa con 20 personas, seguramente, acabe frenando el avance más que acelerarlo puesto que hay que dedicar muchísimo tiempo a instruir al personal, al no existir una incorporación gradual de gente que pueda permitir la implantación de una cultura de traspaso de conocimiento. De hecho, en España es muy habitual que las empresas tiendan hacia la mano de obra low-cost en forma de becarios, personal sin experiencia que, además, implica una alta rotación y obliga a «paralizar la actividad» cada vez que produzcan reemplazos.
Volviendo a Jeff Bezos y sus dos pizzas, si una unidad organizativa no puede almorzar con 2 pizzas, puede que sea una unidad organizativa difícil de gestionar y requiera, por tanto, que reorganicemos nuestra estructura y nos planteemos un plan de crecimiento mucho más ordenado.
Reconozco que es muy tentador ampliar los recursos, es una solución aparentemente sencilla. Sin embargo, para que un recurso aporte valor a la compañía, éste debe aportarnos conocimientos y experiencia que, realmente, se conviertan en palancas que nos hagan llegar más lejos; dicho de otra forma, encontrar talento no es un camino sencillo.
Por tanto, cuando vayas a convocar una reunión y quieres que ésta sea productiva, o bien estés pensando en que tu startup requiere ampliar su personal, piensa en Jeff Bezos y en su regla de las dos pizzas para analizar la situación y pensar si vamos a poder gestionar los recursos de la manera más adecuada.
Imágenes: Scott Beale y Peter Dutton