Una de las áreas que más despiertan mi atención es la historia de la tecnología. Tanto en mi etapa como editor en ALT1040 (hoy Hipertextual) y el blog ThinkBig de Telefónica como actualmente con Diario Turing, la historia de la tecnología es una temática que he tratado (y trato) con bastante frecuencia. Sin duda, una buena forma de entender la tecnología y los dispositivos que nos rodean es entendiendo el camino que hemos recorrido hasta llegar a nuestros días.
Dentro de este periplo por la historia de la tecnología y, por tanto, por conocer el origen de muchos de los dispositivos que, hoy en día, usamos a diario, hoy me he encontrado con un interesante documental sobre los transistores.
Para un ingeniero, el transistor es un dispositivo semiconductor que conoce nada más llegar a la universidad (en mi caso lo estudiamos en primero, en aquella asignatura llamada «Tecnología y componentes electrónicos y fotónicos»); una pieza clave sobre la que se apoyan los circuitos integrados y el mundo de la electrónica digital cuyo hallazgo, a finales de los años 40, marcó un punto de inflexión en el desarrollo de sistemas electrónicos.
Antes del transistor, computadoras como el ENIAC ocupaban habitaciones completas y se tenían que construir a base de válvulas de vacío. Concretamente, el ENIAC ocupaba una superficie de 167 metros cuadrados y estaba formado por 17.648 válvulas de vacío, 7.200 diodos de cristal, 1.500 relés, 70.000 resistencias y 10.000 condensadores unidos mediante 5 millones de soldaduras que unían todos los componentes.
Transistorized!: la historia del transistor a través de un documental
La historia del transistor es más o menos conocida. En diciembre de 1947, John Bardeen, Walter Houser Brattain y William Bradford Shockley desarrollaron, en los míticos Laboratorios Bell, el primer transistor: el transistor bipolar.
Tal y como se ve en la imagen de cabecera, el primer transistor de la historia era bastante grande; nada que ver con los transistores que se desarrollan hoy en día puesto que, en un procesador como los Ivy Bridge de Intel (3ª generación), está compuesto por 1.400 millones de transistores.
Con estos retazos, creo que queda bastante claro el impacto que ha tenido el transistor a lo largo de la historia. Precisamente, esto fue algo que ya se trataba en el documental Transistorized! (un documental que recomendé en Diario Turing el pasado mes de agosto) que nos sumergía en la historia del transistor y en su evolución a lo largo del tiempo (además de su impacto en el sector de la tecnología).
El impacto del transistor según un documental de 1953
Sin embargo, ¿cómo se veía el transistor al poco tiempo de desarrollarse? ¿Llegaba a tenerse una idea del impacto que iba a llegar a tener a lo largo de la historia? ¿La historia del transistor y su impacto era algo que se llegaba a visualizar? Una buena forma de ver la visión que se tenía del transistor en los años 50 es un documental que el servicio histórico de AT&T ha compartido a través de YouTube.
El documental, orientado al público general, mostraba a los espectadores la evolución tecnológica que se había conseguido al pasar de las válvulas de vacío a los transistores. Además, mostraba un aspecto muy interesante: en qué iba a cambiar las cosas la llegada del transistor a la industria, un pronóstico que se dibujaba con televisores portátiles, radios que podíamos llevar en la muñeca a modo de reloj, ordenadores y calculadoras de tamaño reducido, etc.
Realmente, los pronósticos no se quedaron muy alejados de la realidad y, en nuestro día a día, estamos rodeados de dispositivos que se sustentan sobre transistores. Smartphones, tablets, smartwatches, televisores de pantalla plana u ordenadores portátiles son algunos de estos «ejemplos del futuro» para 1953 que, hoy en día, son una realidad que deja bien claro el impacto del transistor en nuestra sociedad.
Una pieza histórica que vale la pena ver (y si tienes un Chromecast, mejor aún verlo en pantalla grande) y guardar en favoritos.
Imagen: MIT y FDominec en Wikipedia